Causas de la pancreatitis en los perros
En muchas ocasiones, no se llega a conocer el origen de la inflamación, aunque puede deberse a la ingesta de comida muy grasa o a la administración de medicamentos u otras sustancias.
El páncreas, que se ubica junto al duodeno, secreta enzimas usadas por el intestino que ayudan a digerir los alimentos. Además, se encarga de secretar ciertas hormonas, como la insulina, que regula los niveles de azúcar en sangre.
Factores como un alto nivel de lípidos en sangre, predispuestos en ciertas razas (p.ej. Schnauzer Miniatura) y en animales obesos, pueden facilitar la aparición de pancreatitis.
Aunque puede afectar a cualquier animal, es más frecuente en razas pequeñas y medianas, de edad media y avanzada (>5 años), y especialmente en animales con obesidad.
Síntomas
Los principales síntomas de la pancreatitis son vómitos, diarrea, dolor abdominal y pérdida de apetito. Los síntomas pueden presentarse de forma gradual, aunque a veces aparecen de forma muy aguda, requiriendo de tratamiento de urgencia.
Diagnóstico
El diagnóstico se realiza generalmente en base a los signos clínicos y la historia del paciente, junto a la realización de una ecografía abdominal.
Los análisis de sangre pueden indicar deshidratación, inflamación, alteración de los parámetros del hígado y de los electrolitos. Una prueba adicional, llamada cPLI (inmunoreactividad de la lipasa específica canina), puede ayudar al diagnóstico en ciertos casos.
Tratamiento
El tratamiento en la pancreatitis aguda se basa en la administración de fluidos suplementados y analgésicos para estabilizar al paciente.
Una vez estabilizado, es muy importante iniciar nutrición por vía oral con una dieta adecuada (baja en grasas), la cual se mantendrá en casa, tras el alta del animal. En algunos casos, puede ser necesaria la colocación de una sonda de alimentación durante los primeros días.
La pancreatitis es una enfermedad muchas veces crónica, que puede requerir de visitas y analíticas de revisión, dietas especiales y un seguimiento estricto. En los casos más severos, la pancreatitis puede derivar en otras afecciones del páncreas, como la insuficiencia pancreática exocrina o la diabetes mellitus.