Sin embargo, según la Ley de Bienestar Animal del 28 de marzo de 2023, en España solo un 27,7% de los perros y un 4,3% de los gatos que llegan a centros de acogida cuentan con un microchip.
Ante esta situación, el microchip en perros y gatos pasa a ser obligatorio desde su nacimiento. También lo es para hurones, y las aves deberán estar correctamente identificadas mediante un anillado. Por eso, a continuación te explicamos exactamente qué es un microchip para animales, por qué es tan importante y cómo funciona.
El Dr. Vet. Tanguy Cullet de la clínica AniCura Tilleuls, Francia, recuerda: «Al realizar este trámite con un profesional autorizado, garantiza no solo su conformidad y la de su animal con la ley, sino también su propia tranquilidad. La implantación del microchip, en particular, es una intervención benigna que a menudo no requiere sedación y es casi indolora. Por lo tanto, se recomienda encarecidamente realizar este simple gesto desde la adopción para prevenir todos los riesgos potenciales asociados con la falta de identificación en el futuro».
¿Qué son los microchips?
Los microchips son pequeños dispositivos estériles implantados por un equipo veterinario en el tejido subcutáneo de los animales de compañía. A cada microchip se asocia un código numérico único, que viene luego cruzado con los datos del propietario en una base de datos, la Red Española de Identificación de Animales de Compañía (REIAC).
Por otro lado, la implantación del microchip en gatos y perros no es solo una formalidad administrativa. Este sencillo gesto protege tanto a los cuidadores como a los animales de diversos riesgos potenciales.
Los microchips funcionan durante toda la vida del perro o del gato, y no necesita mantenimiento. Una vez lo implantes en tu mascota, no tendrás que volver a preocuparte por ello. Además, solo se activan mediante un lector especial, con lo cual no hay riesgo ni de que interfiera con la salud del animal ni de que nadie pueda acceder a tus datos.
¿Para qué sirve un microchip en animales?
Como apuntábamos, el microchip sirve para identificar animales perdidos y contrarrestar el abandono, promoviendo la tenencia responsable de animales de compañía. A través de un pequeño lector es posible identificar el código numérico asociado al animal y, por lo tanto, reconocer a los cuidadores a través de los datos que figuran en la base de datos.
Las ventajas del microchip
En caso de desaparición o fuga, la implantación del microchip permite encontrar mucho más fácilmente al propietario del animal. Esto permite una gran tranquilidad a los humanos y también en los animales, que regresarán a su hogar más rápidamente. Si el animal no está identificado en el mejor de los casos será depositado en un refugio con la esperanza de que sea adoptado por otro propietario en los ocho días siguientes.
Además, un animal identificado es un animal que puede ser asegurado en caso de accidentes causados por él a un tercero, como por ejemplo mordeduras, arañazos u otros ataques. De lo contrario, son los cuidadores quienes deben cubrir el daño.
Un animal con microchip está legalmente vinculado a su cuidador, con las consecuencias jurídicas que ello conlleva, es decir, la posibilidad de recurrir en caso de pérdida, robo, agresión o maltrato por parte de un tercero. Sin microchip, no será posible hacer valer sus derechos en caso de disputa.
La implantación del microchip es obligatoria para viajar dentro de la Unión Europea. Los animales además deben tener las vacunas al día, con justificante del carnet de salud, y un pasaporte. Es importante realizar todos los trámites necesarios antes de viajar al extranjero, para evitar sorpresas desagradables el día de la salida.
Cambiar la ubicación de la identificación en caso de mudanza es esencial para garantizar que el perro o gato pueda ser encontrado rápidamente y de manera segura en su nueva área de residencia.
¿Cómo implantar un microchip en tu mascota?
El proceso debe llevarse a cabo siempre por parte de un equipo de veterinarios. En las clínicas de AniCura contamos con profesionales con experiencia en esta intervención que podrán garantizar que el microchip se coloca en las mejores circunstancias, tanto para perros o gatos como para los cuidadores.
Para ello, solo necesitas pedir cita en tu clínica u hospital veterinario AniCura más cercano y el equipo te acompañará en todo momento. El proceso es muy sencillo: el microchip es una pequeña pieza electrónica dentro de un cilindro de vidrio de apenas unos milímetros de largo, similar a un grano de arroz. Esto se inyecta con una aguja hipodérmica y no necesita ni anestesia ni ninguna intervención específica, por lo que se puede hacer en una cita rutinaria.