Existe una gran variedad de intervenciones abdominales. Entre las más habituales se cuenta la extirpación de ovarios y útero en la castración o en el marco de un tratamiento contra la piometra, así como las cirugías del intestino motivadas por una obstrucción provocada por cuerpos extraños. La vejiga se interviene a menudo para extraer cálculos urinarios, pudiendo emplearse también aquí, y en las esterilizaciones de hembras y criptórquidos, técnicas endoscópicas. Otro ejemplo de operación abdominal es la corrección de malformaciones vasculares congénitas del hígado o la extracción de tumores.