Síntomas
Un perro con neumonía puede manifestar distintos síntomas:
- Tos
- Respiración forzada
- Respiración acelerada
- Flujos nasales
- Fiebre
- Fatiga
- Pérdida de apetito
- Disminución del nivel de actividad
Diagnóstico
Existen varias afecciones que pueden producir síntomas similares a la neumonía, entre otras, una infección por lombrices, una dolencia cardíaca o un cáncer de pulmón. Por eso, para diagnosticar una neumonía se realiza primero un minucioso examen clínico que suele complementarse con una radiografía y análisis de sangre, todo lo cual puede proporcionar información adicional acerca de la causa originaria de la neumonía.
Raras veces las infestaciones de bacterias son el motivo primario de la neumonía, tratándose normalmente de una infección bacteriana secundaria que arraiga al bajar las defensas de las vías respiratorias y los pulmones por otro motivo. Por ejemplo, una infección viral o fúngica, la inhalación de materias extrañas o el megaesófago (una dilatación patológica del esófago) pueden allanar el camino para un contagio bacteriano.
Tratamiento
La neumonía debe tratarse en la mayoría de los casos. En los cuadros más leves el tratamiento puede realizarse en casa, pero si el perro se encuentra muy afectado es probable que deba ser ingresado. La terapia incluye con frecuencia una actuación analgésica y antiinflamatoria, antibióticos y, a veces, suministro de oxígeno y suero. En los hospitales veterinarios se puede administrar al perro la medicación directamente en vena y ubicarlo en un espacio concreto con oxígeno adicional y mayor humedad ambiental, lo que ayuda a disolver la mucosidad de las vías respiratorias. Una vez disuelta dicha mucosidad mejorará la respiración.
Si el tratamiento no surte el efecto esperado, ello puede deberse a que las bacterias son resistentes a los antibióticos. En la determinación de las bacterias y de los antibióticos ante los que son sensibles puede requerirse un cultivo bacteriano. A tal fin, ha de extraerse una muestra de las vías respiratorias inferiores con ayuda de un tubito de plástico insertado a través de la garganta. Este procedimiento se practica bajo sedación o anestesia ligera.
Pronóstico
El pronóstico de recuperación dependerá de lo enfermo que se encuentre el perro y de la causa subyacente de la neumonía. Si esta se detecta, se trata a tiempo y se emplean los antibióticos adecuados para la infección bacteriana, las perspectivas serán buenas siempre que el motivo originario se halle y aborde al mismo tiempo.