En nuestra clínica contamos no solo con un equipo de profesionales altamente cualificados, sino con una infraestructura del más alto nivel para realizar cualquier operación de cirugía veterinaria. Gracias a ello, tu mascota podrá recibir el tratamiento que necesite según su patología, ofreciendo las máximas garantías.
Dentro de la cirugía veterinaria se contemplan muchas clases de intervenciones diferentes. Entre ellas destacan las cirugías más simples como pueden ser las esterilizaciones, y cirugías más complejas y específicas como es el caso de la displasia de cadera. Además, se realiza cirugía de mínima invasión, disminuyendo así las complicaciones que generan las grandes incisiones.
Cirugía veterinaria, siempre con la máxima seguridad
Todas las operaciones que se realizan dentro de la cirugía veterinaria se llevan a cabo bajo estrictas condiciones de seguridad y asepsia, así como el uso de las técnicas anestésicas más efectivas y precisas para cada clase de intervención.
En todo momento, tu mascota estará controlada gracias a las más modernas técnicas de monitorización, lo que hace que junto a la intervención del profesional facultativo, tu perro o tu gato, esté en las mejores manos.
En muchas de las intervenciones quirúrgicas, el paciente recibirá el alta médica el mismo día de la cirugía, aunque hay ocasiones en las que necesitará de cuidados veterinarios específicos durante un tiempo, hasta que reciba alta médica.
Además, para que todo salga a pedir de boca, antes de realizar cada cirugía, la mascota es sometida a diferentes chequeos preoperatorios para poder identificar alguna patología que pueda suponer un riesgo en la intervención.
Estos chequeos dan a los veterinarios una referencia precisa de cuál es la condición en la que se encuentra el animal. De esta forma se puede crear un protocolo de anestesia personalizado para que sea lo más efectiva para cada animal.