Los perros con mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad son los de razas de gran tamaño y los que contemplan una edad madura avanzada.
Síntomas de los perros que sufren espondilosis
Los primeros estadios de esta enfermedad suelen ser asintomáticos, pero cuando estos aparecen, es cuando se agravan los síntomas derivados de la espondilosis. Los signos más frecuentes de la espondilosis entre nuestros canes son:
- Rigidez
- Espasmos musculares
- Atrofia en articulaciones
- Dolor o molestias
- Limitaciones a la hora de realizar movimientos
Estos síntomas son propensos a que aparezcan en las zonas menos compensadas del cuerpo del animal, tendiendo así a sufrir contracturas que se vuelven crónicas con el paso del tiempo, dolores discales o en las raíces nerviosas. Todo esto provoca una falta de flexibilidad que incita a que los perros tengan problemas en su día a día.
¿Tiene la espondilosis en perros solución?
Como hemos mencionado antes, esta enfermedad es degenerativa y, por lo tanto, no curable. Sin embargo, con actividades adecuadas y medicación antiinflamatoria se pueden aliviar los síntomas más leves.
Ejercicios aeróbicos dentro del agua y fisioterapia son los más recomendados entre todos los tratamientos, ya que, con ayuda de profesionales, podríamos devolverle la flexibilidad y el alivio a nuestros peludos.
La acupuntura es otra solución fiable para contrarrestar el uso continuado de medicación que ayuda a los pinzamientos nerviosos en la columna.
Diagnóstico y tratamiento de la espondilosis canina
Una vez que empezamos a ver los síntomas mencionados anteriormente en nuestra mascota, el veterinario puede hacerle un examen completo que incluye, entre otros informes, análisis de orina y de sangre para descartar otras enfermedades. Si la mascota muestra síntomas más graves, dolor al caminar provocado por los daños de los nervios y tejidos, el doctor podría determinar una solución quirúrgica.
Por otro lado, si el animal padece poco malestar y dolor, con un tratamiento médico para el dolor mediante analgésicos bastaría para que la vida de los animales sea mejor.
La actividad del perro tendrá que moderarse y limitarse a dar paseos más lentos, no estar rodeados de muchos estímulos como otros perros o niños activos y necesitará un lugar seguro y tranquilo donde descansar. Todas estas medidas ayudarán al perro a mejorar de sus síntomas y a no correr riesgo de que la salud de nuestro peludo empeore.
Como hemos comprobado, la espondilosis canina es una enfermedad que puede tener consecuencias graves para nuestro perro pero que, con trabajos de movilidad y medicación, se pueden superar los dolores adicionales que surgen a raíz de esta enfermedad y poder disfrutar de nuestras mascotas mucho más tiempo.