La gran mayoría de los perros son curiosos y les encanta explorar sus alrededores. Pero una nariz o una pata en el lugar equivocado puede suponer un problema. Estas partes del cuerpo son las más propensas a las picaduras de víboras o serpientes.
¿Cómo sé si mi perro ha sido mordido?
Debido al físico de los perros, a menudo la serpiente vacía completamente sus glándulas venenosas en el momento de la mordedura, lo que puede causar enfermedades graves si no recibe tratamiento a tiempo. El área mordida estará dolorida y a veces se pueden ver dos pequeños puntos en la piel provocados por los dientes de la serpiente. Los síntomas son la hinchazón en el sitio de la picadura y las áreas circundantes, cansancio y letargo. El estado general de algunos perros se deteriora, puede implicar complicaciones en los órganos internos y un shock que podría provocar incluso la muerte.
Por lo tanto, es importante buscar siempre atención veterinaria tan pronto como sea posible si sospecha que una víbora ha mordido a su perro.
¿Qué hacer con un perro mordido?
Si sospechas que una serpiente ha mordido a tu mascota debes mantener la calma, pero actuar rápidamente. Mantén a tu perro lo más quieto posible, llévalo en brazos si puedes e inmediatamente busca asistencia veterinaria para recibir atención y tratamiento. El movimiento puede causar una propagación más rápida del veneno en el cuerpo de su mascota. No intentes succionar el veneno de la picadura y nunca apliques una venda de compresión.
¿Qué hace el veterinario?
Tu veterinario comenzará a observar los síntomas y el estado de salud general del perro. El tratamiento puede variar, desde reposo en casos leves hasta goteo, alivio del dolor y suero en los más graves. En general el perro debe descansar entre 10 y 14 días después de la mordedura. En otros muchos casos, el perro debe permanecer hospitalizado para observación.