¿Es grave la colangitis en los gatos?

La colangitis en gatos es una patología que suele afectar a felinos de edad media-avanzada y que, si no se trata a tiempo, puede llegar a ser muy grave, dependiendo el pronóstico de la severidad de los signos clínicos y de las alteraciones que se hayan producido. Por eso, un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuados son claves para que nuestro felino goce de buen estado de salud. A continuación, te explicamos qué es la colangitis en gatos, cuáles son sus síntomas y cómo se realiza el tratamiento.

¿Qué es la colangitis neutrofílica en gatos?

La colangitis es una enfermedad que se caracteriza por la inflamación de los conductos biliares, que es donde se almacena la bilis que produce el hígado. Esto puede hacer que nuestros peluditos se sientan cansados, sin apetito y con síntomas que sugieren un problema hepático, como puede ser la ictericia o el color amarillento de las mucosas, así como el aumento de la bilirrubina, las enzimas hepáticas o los ácidos biliares.

Los dos tipos de colangitis en gatos que podemos ver con mayor frecuencia son la linfocítica y la neutrofílica. De las dos, la colangitis neutrofílica en gatos es la más habitual. La colangitis neutrofílica está producida por una infección bacteriana que asciende por las vías biliares desde el tracto intestinal, pudiendo llegar hasta el páncreas mediante el conducto pancreático. Debido a ello, este tipo de colangitis suele relacionarse en muchos casos con la pancreatitis y con la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD), dando lugar a una enfermedad conocida como triaditis. En este sentido, es muy importante tener en cuenta esta asociación y no centrarse solamente en la colangitis.

Síntomas de colangitis en gatos

En casos agudos, los síntomas de colangitis en gatos suelen ser la fiebre, la anorexia, la ictericia, los vómitos, la pérdida de peso y el dolor abdominal. Síntomas que pueden terminar cronificándose si la enfermedad no es tratada a tiempo.

Mientras que, en casos menos graves de colangitis linfocítica, podemos observar síntomas de ictericia y pérdida de peso, pero con cierta estabilidad. Eso sí, hay que tener en cuenta que si la enfermedad avanza, el animal puede desarrollar cirrosis biliar, pudiendo llegar a provocar una ascitis (acumulación de líquido en la cavidad abdominal).

Para realizar un adecuado diagnóstico, lo más efectivo es realizar una biopsia, pero en algunos casos puede ser necesario llevar a cabo pruebas complementarias, como pruebas de imagen o un análisis de sangre. Por lo general, el análisis de sangre mostrará un aumento de bilirrubina y de enzimas hepáticas, pero en algunos casos los resultados pueden ser normales, lo que no quiere decir que no haya colangitis. Y lo mismo puede suceder con la ecografía abdominal. Normalmente, pueden constatarse cambios en la vesícula biliar y dilatación de conductos.

Tratamiento de la colangitis felina

En cuanto al tratamiento para la colangitis en gato, cuando hablamos de colangitis neutrofílica, lo más habitual es que realice un tratamiento antibiótico, que será determinado por el veterinario en base al cultivo realizado o, en su defecto, con un antibiótico de amplio espectro. En función del estado del animal y de cómo vaya respondiendo a la medicación, puede que se necesiten, además, otros tratamientos como la fluidoterapia o los antieméticos.

En el caso de la colangitis linfocítica, el tratamiento suele ser inmunodepresor, actuando como soporte para evitar que la enfermedad siga avanzando. Hay que tener en cuenta que si el gato termina desarrollando ascitis, el pronóstico empeora.

Afortunadamente, los gatos con esta patología suelen mejorar. No obstante, hay veces en las que el tratamiento debe mantenerse de por vida. En el caso de la colangitis neutrofílica, los gatos que sobreviven a la fase aguda inicial suelen vivir varios años, pero es probable que se produzcan recaídas, sobre todo si se da una enfermedad concurrente como la pancreatitis.

Mientras que, en el caso de los gatos con colangitis linfocítica, la dilatación de los conductos biliares puede ser irreversible, aumentando el riesgo de desarrollar infecciones ascendentes. Debido a ello, un diagnóstico a tiempo y un tratamiento adecuado son fundamentales para garantizar la salud de nuestro gato.

Contact a veterinarian

Did this article help you?

Please select what suits your situation or type on your own. We greatly appreciate your feedback.

Thank you!

We really appreciate it

Error

An error has occurred. This application may no longer respond until reloaded.